EL PANTANO DE ELDA
El espacio de “El Pantano” posee una gran importancia en cuanto a su valor ecológico, paisajístico, patrimonial, etnológico e histórico.
Este espacio es atravesado por el Río Vinalopó, que actúa como corredor natural entre las diversas zonas naturales de Elda y Petrer.
El Paraje Natural Municipal “El Pantano” forma parte del Catálogo de Zonas Húmedas de la Comunidad Valenciana, y su mayor atractivo es su bosque de tarays, una especie que acostumbra a crecer a lo largo de ríos y corrientes de agua, y que en nuestro caso ha conformado uno de los más extensos tarayales de toda la región.
Además de los tarays, se pueden observar carrizos, lianas como la rubia o la correhuela blanca y otras especies como el cenizo blanco o la sosa jabonera.
En cuanto a la fauna, las zonas húmedas presentan gran interés al ser importantes enclaves naturales para su estudio. En el caso del Pantano de Elda, se destaca la presencia de la alondra común, una especie protegida según el Catálogo Valenciano de Fauna Amenazada. Asimismo, en la categoría de especies protegidas también se encuentran el sapo común y la culebra bastarda, mamíferos como el erizo europeo y la musaraña gris.
En cuanto a su valor cultural, el Pantano de Elda presenta un extraordinario patrimonio histórico y cultural. La presa del Pantano data de finales del siglo XVII, y en su origen tenía entre 11 y 13 metros de altura. Durante el siglo XIX, se realizaron varias obras para arreglar los desperfectos del paso de los años, que dotaron a la presa de un muro escalonado y dos torres adosadas.
En el entorno del Pantano, además, se encuentran una serie de acequias, el Acueducto de Aguas de Elche, el Canal de la Fábrica de la Luz, el Túnel del Ferrocarril, los Hornos de Cal y otras tantas estructuras.
Además, en la zona se localizan varios yacimientos arqueológicos, entre los que destacan la Cueva de la Casa Colorá, que se remonta al Calcolítico, el Poblado del Bronce de Canalón, y por supuesto el Poblado iberorromano del Monastil, de gran importancia, y la torre medieval de la Torreta, del siglo XIV.
Para finalizar, señalar que el paraje en torno al pantano está conformado por un conjunto de relieves diferenciados. Por una parte, la Sierra Torreta-Monastil con más de 500 metros de altitud, y por otra, zonas asociadas al recorrido del Río Vinalopó. Por tanto, cabe señalar la calidad de alas vistas que ofrece tanto el Pantano como su entorno.