La placa conmemora el lugar donde se situó la casa en la que vivió Emilio Castelar cuando a los escasos 7 años (1839) se traslado junto con su madre y su hermana a Elda a vivir. Casa que fue su residencia hasta que se trasladó a Madrid (h. 1849) a estudiar en la Universidad.
Fue el 7 de septiembre de 1926, efeméride del 94 aniversario del nacimiento de Castelar, cuando, a instancias del semanario Idella se instaló en la fachada de la casa una placa de bronce con la efigie del gran tribuno, obra del prestigioso escultor alicantino Vicente Bañuls.
La casa original fue derribada con motivo de la apertura y alineación de la calle Colón en un momento impreciso entre 1966 y 1972. Afortunadamente, la placa original logró salvarse siendo recolocada en 1991 en el edificio de nueva construcción que se levanta donde se levantó la casa donde vivió Emilio Castelar sus años de infancia.
(Textos de Gabriel Segura)
Fue el 7 de septiembre de 1926, efeméride del 94 aniversario del nacimiento de Castelar, cuando, a instancias del semanario Idella se instaló en la fachada de la casa una placa de bronce con la efigie del gran tribuno, obra del prestigioso escultor alicantino Vicente Bañuls.
La casa original fue derribada con motivo de la apertura y alineación de la calle Colón en un momento impreciso entre 1966 y 1972. Afortunadamente, la placa original logró salvarse siendo recolocada en 1991 en el edificio de nueva construcción que se levanta donde se levantó la casa donde vivió Emilio Castelar sus años de infancia.
(Textos de Gabriel Segura)